El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), a través de la Unidad de Medicina Física y Rehabilitación Centro (UMFRC), ha fortalecido el proceso de rehabilitación integral de personas con lesión medular mediante el innovador Programa de Movilidad Urbana, una iniciativa que ha transformado vidas desde su creación en agosto de 2018.
La Coordinadora Clínica de Educación e Investigación y del Programa de Movilidad Urbana de la Unidad, doctora Celia Itxelt Infante Castro, señaló que este programa, diseñado para pacientes con paraplejia y usuarios de silla de ruedas, se enfoca en el desarrollo de habilidades avanzadas para enfrentar los retos del entorno urbano, laboral y educativo.
Destacó que a la fecha más de 80 pacientes participaron en prácticas de movilidad urbana, y 16 de ellos lograron reintegrarse plenamente a la sociedad y han alcanzado metas personales y profesionales, como estudios de posgrado y liderazgo en sus áreas laborales.
La doctora Infante Castro explicó que el programa se desarrolla en dos fases: una inicial durante la hospitalización, centrada en la independencia funcional y prevención de complicaciones; y una segunda fase, posterior al reingreso hospitalario, enfocada en el entrenamiento avanzado en el manejo de silla de ruedas.
Abundó que esta última etapa culmina con la práctica de movilidad urbana, donde los pacientes aprendieron a utilizar el transporte público y sortear barreras arquitectónicas como banquetas, rampas y escaleras.
“Este programa va más allá para que la persona con lesión medular pueda trasladarse de manera independiente usando un transporte público, dirigiéndose a su centro educativo, su centro laboral o su centro recreativo”, indicó.
La especialista del Seguro Social refirió que el éxito del programa se sustenta en un enfoque interdisciplinario que involucra a médicos especialistas, terapeutas físicos y ocupacionales, psicólogos, trabajadores sociales, personal de Enfermería, entre otros.
“Como profesionales de la especialidad de rehabilitación somos sensibles a que no atendemos a personas con un diagnóstico, atendemos personas con una condición de vida que se llama discapacidad y tenemos que priorizar las necesidades que el paciente nos diga para comprometerlo en este proceso y sea partícipe de este equipo de rehabilitación, porque eso puede hacer la gran diferencia”, dijo.
La doctora Itxelt Infante Castro agregó que se cuenta con el respaldo de la fundación Vida Independiente México, que colabora con equipamiento y en la capacitación práctica, la cual se realiza en espacios públicos como lo son el Metrobús y el Centro de Capacitación y Rehabilitación para el Trabajo (CECART).
Refirió que el Programa de Movilidad Urbana del IMSS incluye también la capacitación de familiares, quienes aprenden a brindar acompañamiento sin caer en la sobreprotección, lo cual permite que los pacientes desarrollen una movilidad verdaderamente independiente.
“El programa en habilidades les da que ellos puedan subir y bajar una escalera con la silla de ruedas, puedan vencer la mala planeación arquitectónica, como el mal diseño de una rampa que esté muy inclinada”, explicó la especialista.
Infante Castro remarcó que el programa se dirige a pacientes que cumplen con criterios clínicos, psicológicos y sociales establecidos por el equipo interdisciplinario, lo cual garantiza que cada participante esté preparado para enfrentar los desafíos del entorno urbano. “La experiencia de llevar a esta persona con discapacidad a la calle es enfrentar sus propios miedos, sus propias limitaciones y las de su familia”.
Reconoció que la atención médica digna y eficiente para personas con discapacidad se ha convertido en una prioridad para el Instituto, ya que “hoy por hoy el IMSS se ha preocupado mucho por otorgar una mejor condición de atención médica más digna y, en este momento, se está preocupando por otorgar una atención de rehabilitación más digna con calidad y eficiencia para todos sus usuarios”.
La Coordinadora del Programa de Movilidad Urbana del IMSS añadió que este compromiso se refleja en la apertura institucional hacia las personas con discapacidad, quienes encuentran en el Seguro Social espacios especializados y personal capacitado para atender sus necesidades.
Este enfoque humanista y centrado en el paciente ha permitido que el IMSS no solo brinde atención médica, sino que también promueva la inclusión, la autonomía y el respeto a los derechos de las personas con discapacidad, al consolidar un modelo de atención integral, digna, eficiente y centrada en las necesidades humanas de sus derechohabientes.